El Colegio de Profesores anunció que iniciará un paro nacional después de las vacaciones de invierno, ante las respuestas del Gobierno a su petitorio y las demandas que los docentes califican como no resueltas, tales como la «deuda histórica», el agobio laboral, bono de retiro y salud mental.
La decisión fue adoptada en su asamblea nacional, que se desarrolló después que se conocieran los resultados de la Consulta Nacional del Magisterio en donde participaron unos 20.000 profesores y en el que más de un 80% se mostró decepcionado de las respuestas del Ejecutivo.
«Esta convocatoria del paro nacional, que ha sido la expresión de sobre el 95% de la asamblea nacional reunida el día de hoy, se realizará después de las vacaciones de invierno y comenzaremos en un paro ascendente, cuyo primer hito será por 24 horas», explicó Carlos Díaz, presidente del colegiado.
«Cuando usted no tiene los establecimientos educacionales en las condiciones que los estudiantes se merecen y hay una infraestructura deplorable, con ratones por todas partes, obviamente que eso afecta y así se ha demostrado también con lo que han sido los resultados de la prueba Simce, por ejemplo: cuando usted tiene a los profesores sin recibir su sueldo, sin saber qué van a hacer para dar de comer a sus hijos porque se les paga el 40% del sueldo, eso también afecta indudablemente», acusó.
Así, el lider del Magisterio afirmó que para el gremio «es doloroso tener que llegar a esta situación de convocar a una paralización en el país, pero indudablemente no nos queda otra alternativa. Hemos venido conversando por más de un año».
Conocida esta noticia, el ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, dijo que «quiero reiterar mi invitación, y se lo he hecho al presidente del Colegio de Profesores, que probablemente cada una de las demandas puede ser muy justa, podemos seguirlas trabajando, en el Mineduc siempre han estado las puertas abiertas; sin embargo, uno tiene que darse cuenta de que no es el momento propicio».
